El fenómeno de la desagregación del negocio Bioscience en las compañías farmacéuticas
En un mercado farmacéutico en el que la biotecnología aumenta progresivamente su presencia en el portfolio de las grandes compañías farmacéuticas, algunas optan por separar las divisiones más relacionadas con las Biosciences para dotarlas de más independencia en la toma de decisiones y aumentar la asignación de recursos.

Por Xavier Vengohechea. Antares Consulting
En los últimos años estamos asistiendo a un fenómeno que puede parecer contrario a la tendencia existente en el mercado farmacéutico en el que las fusiones y adquisiciones son el pan de cada día, pero que sin embargo crea valor para las organizaciones y sus accionistas : la desagregación del negocio Bioscience.
Uno podría cuestionarse si estos casos de desagregación son acertados o no. En general, las fusiones y adquisiciones (tendencia actual en el mercado farmacéutico) son estrategias que emplean las compañías para asegurar un crecimiento sostenido a largo plazo para satisfacer las expectativas de sus accionistas, sin embargo ¿quiere decir entonces que la desagregación no es una buena estrategia para crear valor para los accionistas?
Veamos el caso de Abbvie:
En Octubre de 2011 Abbott anunció el plan para separar su negocio en 2 compañías distintas, una diversificada en distintos productos sanitarios y la otra en fármacos desarrollados total o parcialmente en la compañía. La compañía centrada en fármacos innovadores que pasaría a ser conocida como Abbvie salió a bolsa en Enero de 2013. Previa a su escisión, en 2012, el negocio de lo que sería Abbvie aportaba a la compañía unas ventas de 18.380M$, es decir, un 45% de los 39.874 M$ totales que facturó Abbot en 2012. Los títulos de Abbvie empezaron a cotizar en el NYSE en Enero de 2013 a 34,40$ por acción; a finales de abril de 2015 su cotización supera los 65$. Por lo tanto, parece que la segregación fue útil para enfocar la organización hacia sus clientes y ha creado valor para los accionistas.
El caso de Baxalta puede tener algunas analogías:
El pasado Marzo de 2014 Baxter anunciaba la segregación de su división BioScience de la división de Medical Products para mediados de 2015. En Septiembre de 2014 anunciaba que la nueva compañía correspondiente a la división BioScience se llamaría Baxalta Incorporated mientras que la división de Medical Products mantendría el nombre de Baxter International. En 2014 la facturación de la división Bioscience fue de 6.699M$, lo que representa un 40% del total de ingresos de Baxter: 14.967M$, una porcentaje similar al de Abbvie respecto a la casa madre. Los inversores valoraron positivamente esta decisión estratégica y las acciones pasaron de los 67 a los 74 $ (+10%) en pocos días, lo que puede indicar que se espera que este movimiento sea positivo para la compañía.
En el caso de Bayer, también parece que los inversores aprueban la escisión del negocio de Material Sciences (incremento de un 40% del valor de las acciones entre el anuncio de la escisión en Septiembre de 2014 y Abril de 2015); y es que según directivos de la compañía, la escisión de dicha división permitirá invertir más recursos en un área de mayor valor añadido y mayor crecimiento como es el sector salud.
Finalmente, vale la pena comentar dos casos en los que aunque no existe una escisión de la propiedad de la empresa, sí que existe una división organizativa muy clara. Estos casos son Novartis Oncology que opera independientemente de Novartis, y Cinfa Biotech que opera independientemente de Cinfa.
De estos 5 casos se desprende que las organizaciones de éxito se focalizan en sus clientes target para poder aportarles más valor y conseguir una mejor performance, lo que a su vez se traduce en un mayor retorno para los accionistas.